¡Bravo!

20/07/2020

Vivana Alonso, alumna de La evolución de las ideas de la música

No sabía distinguir el Barroco del Clásico del Romanticismo antes de escuchar a Sergio Feferovich. Aprendí mucho de la evolución de las ideas en la música. Descubrí el canto de los pájaros en primavera, el letargo del verano y el sonido del hielo quebradizo del invierno en las Cuatro Estaciones de Vivaldi. Escuché y entendí el ornamento y el detalle predominantes en las obras del Barroco; comprendí qué significa el virtuosismo y por qué surge justamente en el Barroco; percibí a los virtuosos interpretando a los pájaros, los truenos y los relámpagos. 

Descubrí una manera distinta de escuchar. Aprendí que los conciertos nacen cuando uno o varios solistas se ponen de acuerdo (conciertan) con la orquesta..Me enteré que Hayden pasó sus últimos años en Londres y allí le dedicó sus últimas sinfonías al rey con una carta en la que le decía que “eran especialmente difíciles, tan difíciles que deberían ensayarse al menos una vez”. En esa época no había ensayos, los músicos ponían la partitura y se lanzaban a tocar. Minutos después de hablar de Hayden, cuando vimos un video de la Quinta Sinfonía de Beethoven interpretada por más de 100 músicos entre la orquesta y dos coros, imaginé otra orquesta tocando esa música hace 300 años por primera vez. El pasado se sobre imprimía al presente y era increíblemente emocionante, en especial, cuando ví que el director al frente de los 100 músicos era el mismo que está dictando el curso por Zoom con total dedicación. ¡Bravo!

Me dí cuenta que escuchar mejor ayuda a entender más, y que cuando sabés más, percibís mejor. Lo entendí y lo experimenté. Abrí los oídos, un acto simple y súper poderoso. Me llevo muchas ideas en la música y, sobre todo, me llevo música en las ideas.

Viviana Alonso