Poner el caballo, antes del carro.
Fanny Cohen, alumna de Vivan las Ideas.
Fue mi primer pensamiento al terminar el encuentro sobre el camino del artista. ¡Curiosa asociación! Y enseguida pensé: ¡ahí está la clave! Siguiendo la tendencia siglo XXI fui a buscar a Google que quería decir y encontré: «Hacer las cosas en el orden contrario al lógico.».
Luego empecé a reflexionar sobre mi propia experiencia como “intento de artista” y en muchas historias a las que tuve acceso como psicoanalista. Muchos comienzan a expresarse en distintas disciplinas y terminan “en nada”. La motivación se va extinguiendo a medida que los primeros ensayos no están a la altura de las expectativas. O frente a la “inhibición” de mostrarse antes otros.
Primero hay “que llenar el carro” y este es el difícil camino del artista. Hacer, hacer ….. re-hacer, volver a empezar. Hay un camino a recorrer antes de poder poner el caballo y “arrancar”. Y el arrancar muchas veces se da a partir de un encuentro inesperado, o una ocasión inesperada. No es algo que se decide voluntariamente, sino que “acontece”. Con toda la lógica del “acontecimiento”.
Volvimos a Google: «El término acontecimiento nombra la alteración azarosa.». Es todo lo que sucede y posee un carácter poco común o excepcional. Sin carro lleno, no hay acontecimiento que ponga un motor. Puede suceder que alguien “cree” algo y un hecho inesperado lo haga Star-Up. Pero luego hay que sostenerlo. No hay manera de evitar el camino de llenar el carro.
En la era de la fotografía digital, el Photoshop es el equivalente al antiguo “cuarto oscuro” donde se revelaban las fotos y se daba el “toque final”. Como fotógrafa “no profesional” vengo estudiando cómo manejar este programa y un día “curioseando” encontré que podía poner “arboles a mis fotos”. Se abrió un mundo nuevo y “descubrí” mi gusto por armar imágenes de ficción.
Cuando me estaba preguntando “And now what?”, como la vieja propaganda de Poxipol, vino la clase “El camino del artista”. Y ahí me dije “A seguir llenando el carro”.
Fanny Cohen