Lemonade: Inteligencia artificial aplicada a los seguros
Santiago Tissembaum Augé nos cuenta sobre el último encuentro del Seminario de Análisis de Empresas.
La aseguradora Lemonade tiene el récord mundial de rapidez en la cobertura de un siniestro: tres segundos. Así es, luego de realizado el descargo, el cliente ya tiene depositados, a los tres segundos, los fondos correspondientes. En esta edición del Seminario de Análisis de Empresas, Mariano Zorrilla nos comenta sobre esta compañía de seguros basada en la inteligencia artificial y las ciencias del comportamiento.
Se trata de una empresa creada en el año 2016, que a inicios de 2020 ya tenía vendidas más de 1.2 millones de pólizas en los Estados Unidos, que factura alrededor de 150 millones en primas brutas y está valuada en 3.1 billones de dólares.
La idea tiene dos pilares fundamentales. En primer lugar, la atención al cliente en términos de servicio y velocidad (queda claro con el ejemplo inicial). En segundo lugar, ha sido etiquetada como public benefit corporation (corporación de beneficio público). Esto quiere decir, que no solo tiene como finalidad la maximización de los beneficios, sino también objetivos relacionados con la sustentabilidad y la responsabilidad social.
Entonces, ¿cómo funciona? Se trata de un modelo conocido como peer-to-peer (de igual a igual), y es totalmente diferente al implementado por las aseguradoras convencionales. Los clientes abonan mensualmente la tarifa correspondiente, del cual Lemonade toma un porcentaje fijo del 20%, derivando el resto a un fondo común, utilizado para cubrir los siniestros. Aquí viene la parte innovadora, si al final del año sobra dinero en el fondo, este se destina a una organización sin fines de lucro a elección de los clientes.
De esta manera, se alcanza lo que Dan Ariely, director de la oficina de comportamiento, define como un equilibrio positivo. Por el lado de Lemonade, al no verse afectado por una mayor cobertura de siniestros, ese número tiende a ser mayor. En cuanto a los clientes, se disminuye la sobre declaración de los accidentes, debido a que estarían quitando fondos a la ONG que defienden.
Con respecto a la rapidez, se logra dado que es una compañía totalmente digital, que implementa inteligencia artificial para analizar la veracidad de los reclamos. En consecuencia, más del 30% de los casos son manejados instantáneamente, derivando el resto a empleados que siguen el proceso. En este sentido, Mariano indica que la misma empresa se define como SaaS (Software as a Service). Es decir, su principal actividad es la provisión de las herramientas digitales para facilitar el intercambio.
Actualmente, las coberturas alcanzan alquileres, casas y mascotas, siendo los adultos jóvenes su principal público. La apuesta reside en que aquellos que en la actualidad se encuentren alquilando, cuando se muden a su propia casa, también la aseguren con Lemonade. Esto incrementa considerablemente el monto facturado, ya que el seguro para los dueños de inmuebles es cinco veces el del alquiler.
Si bien la compañía captó una extravagante cantidad de clientes en poco tiempo, existen incógnitas en cuanto a la solvencia del negocio. Esto surge a partir de, justamente, sus altas tasas de cobertura y precios que son hasta 70% más baratos que la competencia. La pregunta es: ¿qué ocurriría si, en vez de sobrar dinero en el fondo, faltara? Para lidiar con esto, la empresa se encuentra reasegurada por un 75% de sus fondos. Es decir, contrató un seguro que corre el riesgo (y se queda con los beneficios) de ese porcentaje de las operaciones. De esta manera, Lemonade pasa a actuar como intermediario, disminuyendo la volatilidad en sus ingresos.
Finalmente, cómo todo mercado de seguros, la clave pasa por cuan bien se estimen los riesgos de los clientes. La mejora de los algoritmos que realizan este trabajo en Lemonade, será el factor que determinará el futuro de la compañía.
Santiago Tissembaum Augé.
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